En un pueblicito en la selva peruana vivía Hector un niño que, al regresar todos los días a su casa ; pasaba por la casa de un hombre muy rico.
Hector la mayoría de las veces se detenía en la ventana de aquella casa para observar a otro niño , el era Rodrigo casi de su misma edad. Rodrigo siempre estaba rodeado de juguetes Hector lo admiraba por que pensaba que tenia todo para ser muy feliz.
Poseía los mejores juguetes y casi siempre estaba muy solo , por lo que no había nadie quien lo molestara.
En cierta ocasiona ambos niños se encontraron en un parque y comenzaron a jugar . Al cabo de un rato de estar jugando el niño se dio cuenta de que su compañero disfruta mucho de su compañía .
Se reía y celebraba todo lo que el hacia y entonces , aprovecho para preguntarle por los juguetes que había visto a través de la ventana. Rodrigo dijo : Es lo único que tengo , pero en realidad cambiaría todo eso por tener un hermanito con quien jugar que me sirva de compañía o por la posibilidad de estar mas tiempo con mis padres ellos casi nunca estas en mi casa y paso mucho tiempo solo y triste , cayendo una lagrima por su mejilla Hector le respondió : yo seré tu hermanito vendré a jugar todos los días contigo.
Así formaron una linda amistad y desde ese día Hector que pasaba todos los días por la casa de Rodrigo comprendió que las apariencias engañan .
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